Agave angustifolia podría ser consideredo el agave más comercializado
porque puede ser cultivado “industrialmente” en planos arriba de 2000
metros sobre el nivel del mar y es reproducido por su semilla y brote. Su
tiempo de maduración de 5 a 9 años, comparado con otros mezcales hace
que sea más productivo.
Se adapta perfectamente a climas secos como el de Santiago Matltlán,
donde nuestro palenque de 5 generaciones está localizado.
Un mezcal joven que es traslúcido al ojo, puede ser platinado, brillante o
espumoso, puede ser clasificado como el más ahumado o astringente de
nuestros mezcales, el que se acerca más al agave cosechado más
recientemente pero con la dulzura de una piña cocinada y una amargura
cítrica... pero con notas de tierra húmeda que traen un sabor único y
suave al paladar, notas que también se diferencian en la nariz mientras
nos recuerdan de la humedad de grama recién cortada, hierbas y algunos
aromas dulces como la vainilla.
