Imagina un adorable juguete diseñado especialmente para los más pequeños, inspirado en el encanto y la tranquilidad del oso perezoso. Este juguete sería suave al tacto, con un pelaje mullido que invita a los bebés a abrazarlo y acariciarlo. Sus colores serían brillantes y atractivos, con tonos suaves que no abrumen los sentidos del bebé.